CAT identitat / EN identity / FR identité / DE Identität

La identidad de una persona es la concepción que ella misma se ha formado de su relación con su entorno social: "[People] try to act as though they are who they say they are. These self understandings […] are what we refer to as identities" (Holland et al. 1998: 3). Aprender una nueva lengua supone una contribución a la construcción de la identidad, puesto que comporta un esfuerzo por forjar nuevas formas de relacionarse con el mundo mediante la palabra, nuevas relaciones interpersonales en las que se desea seguir siendo una misma persona pero se han de adoptar nuevas formas de actuación: “As [a] person encounters new, and especially challenging, situations, new and different ways of relating to these situations need to be constructed, and this construction work is referred to as identity” (Van Lier 2009: xiv). La agencia del aprendiz, en su intento por expresarse desde una determinada identidad, le permite redefinir su relación con sus interlocutores y adoptar nuevas identidades más poderosas desde las que pronunciarse, y de ese modo progresar en el aprendizaje.

Con orígenes remotos en las teorías de Bajtín y de Vygotsky sobre la mediación del lenguaje, el concepto procede de la teoría sobre la subjetividad y las relaciones de poder de la sociología postestucturalista (Bourdieu). Autores como Norton (2013), Pavlenko (2002) o Van Lier (2009), entre otros, lo han aplicado en sus trabajos sobre el aprendizaje de lenguas. De acuerdo con ellos, el aprendiz de una lengua adicional construye y negocia identidades múltiples cuando participa en actividades de la lengua, una participación que se da desde unas determinadas relaciones de poder y legitimidad, que son variables y están condicionadas por el contexto. A diferencia de los enfoques psicolingüísticos, interesados en los estilos de aprendizaje y la motivación, la atención a la identidad se interesa, pues, más por los contextos sociales, históricos y culturales del aprendizaje y el modo en que los aprendices cuestionan o negocian el lugar que en ellos se les asigna; abandona una visión estática del aprendiz y sus factores afectivos, a los que considera el resultado de una construcción social, por lo que su naturaleza puede cambiar a tenor de los diferentes contextos.

Referencias

  • Holland, Dorothy; Lachicotte Jr., William; Skinner, Debra & Cain, Carole. (1998). Identity and agency in cultural worlds. Cambridge: Harvard University Press.
  • Norton, Bonny (2013). Identity and language learning: Extending the conversation. Bristol: Multilingual Matters.
  • Pavlenko, Aneta. (2002). Poststructuralist approaches to the study of social factors in second language learning and use. In V. Cook (Ed.), Portraits of the L2 user, 277- 302. Clevedon: Multilingual Matters.
  • Van Lier, Leo (2009). Foreword: Agency, Self and Identity in Language. En Breffni O'Rourke y Lorna Carson (Eds.), Learning Language Learner Autonomy: Policy, Curriculum, Classroom : a Festschrift in honour of David Little. Berlín: Peter Lang.