El pasado 11 de febrero, Pablo Javier Andrada Sola defendió la tesis titulada “La educación mediática de profesionales de educación infantil. Evaluación de planes de estudios, creencias y percepción de la competencia mediática”, dirigida por el Dr. Joan Ferrés Prats. El tribunal de este acto académico estuvo presidido por la Dra. Mònica Figueras (Universitat Pompeu Fabra), el Dr. Agustín García Matilla (Universitat de Segovia) como secretario y el Dr. Manuel Pinto (Universidad do Minho) como vocal. La tesis obtuvo la calificación de “Excelente”.

Esta investigación surgió hace seis años al encontrarse el ya doctor Pablo Javier Andrada trabajando en un jardín infantil en Chile, país donde la profesionalización de este campo empezó a darse hace apenas dos décadas. Su estudio pone énfasis en la configuración de la educación en Chile (donde la educación es obligatoria desde los cinco años). Andrada Sola establece en su tesis un diálogo a través de los resultados y las ideas iniciales, entendiendo al niño como un sujeto de derecho.

El director de la tesis, Joan Ferrés, señaló que el trabajo de Pablo le hizo sentir culpable al reconocer después de cincuenta años trabajando en educación mediática el poco énfasis que le había otorgado en la educación infantil. Quiso destacar, además, la capacidad académica e investigadora del doctorando, así como su capital humano, su entusiasmo y su entrega.

Manuel Pinto, por su parte, puso énfasis en que hay que tratar al niño no como un instrumento sino como un ser humano capaz de crear su propio camino. En otras palabras, hay que poner énfasis en cómo los niños viven la infancia, etapa en la que se desarrollan las capacidades cognitivas. El profesor señaló y destacó también los objetivos y la metodología seguidos por Andrada Sola para llevar a cabo una formación de educadores de infantil en educación mediática.

Agustín García Matilla, por su parte, planteó la necesidad de que se abarque la educación desde el propio contacto comunicativo más básico, de tratar al niño desde el concepto de la creatividad. Para acabar su intervención, le planteó a Pablo Javier Andrada dar un paso adelante con sus aportaciones y vincular el ámbito de la emoción a la educación mediática, más allá de la dimensión tecnológica.