Los orígenes

El discurso sobre el eros de Platón se debe enmarcar dentro de un cosmos moral muy concreto caracterizado por un orden Bello y Justo. Una Belleza y Justicia que esconden la Verdad suprema. Ahora bien, ¿cómo se accede a tal Perfección? Platón plantea la vía del amor y la convierte en el punto de partida filosófico. Este camino es el proceso de ascensión por vía erótica y queda especialmente reflejado en El banquete y en Fedro

En estos diálogos, el eros se entiende desde las dos perspectivas. De un lado, como manía o locura divina, término que aparece en Fedro, que permite un estado de disposición frente a la Perfección y a la Belleza. De otro lado, el eros como daimon, idea de El banquete; es decir, un intermediario entre la vida humana y la divina, entre el mundo sensible y el inteligible. Una disposición vinculada a la teoría del conocimiento. Así mismo, hay otro diálogo: Lisis. Si para Platón el amor erótico sería el punto de partida filosófico, ¿es posible otro inicio? Lisis propone el amor de la amistad, que también sería un ejercicio y reto epistémico. Sin embargo, este amor es philia y no eros. Una philia que supone un vínculo de afinidad entre dos individuos que se retroalimentan. Este fenómeno también representa disposición amorosa, porque la afinidad resulta divina y, en parte, explicaría el motivo de la unión, ya que es gracias a esta afinidad que el amante ve en el amado la trascendencia y a la vez un espejo en el que contemplarse. Un fenómeno puro que, aún partiendo de la philia, acaba siendo eros, incluso ágape —cuando hablamos de amor paterno-filial. 

 

Para Platón, Eros es una figura intermediaria, un guía que dirige al hombre hacia la Belleza. En definitiva, el eros platónico es deseo —egoísta— de ascensión celeste, que, consciente de carencia y con voluntad posesiva —aunque noble—, objetualiza la belleza mundana para acceder a un estado moralmente superior. Un fenómeno misterioso que solamente puede explicarse desde un lenguaje mítico.

 
 

Osborne, Catherine. (1996). Eros unveiled: Plato and the God of love. Oxford: Clarendon press.

Excelente manual para comprender el fenómeno del amor, desde el eros griego hasta el ágape cristiano.

Blumenthal, HJ i Markus, RA. (1981). Neoplatonism and early Christian thought: essays in honour of A. H. Armstrong. London: Variorum.

Destaca la selección del primer capítulo, en el cual se dedica un espacio relevante al papel del eros en Platón.