A través de la metodología flipped classroom, que promueve el trabajo práctico en las clases presenciales, han elaborado 24 vídeos divulgativos para estudiantes de secundaria sobre temáticas como la acentuación y el apostrofación o los false friends y los phrasal verbs en inglés. Además, aparte del material audiovisual, también han elaborado propuestas de explotación didáctica para el instituto después de documentarse y reflexionar sobre cuál era la mejor manera de trabajar cada tema.

 

La iniciativa, tal como explica Encarna Atienza, profesora de la asignatura, "surgió de los propios estudiantes, que se mostraron interesados ​​en ofrecer los proyectos que habían trabajado en el aula a instituciones de nuestro entorno".

 

Georgina Garcia, estudiante de la UPF que participó en el proyecto, asegura que gracias a "las clases dinámicas, la libertad para plantear el trabajo y la ausencia de clases magistrales hemos obtenido una nueva perspectiva de impartir clase que resulta muy enriquecedora, tanto para el docente como para el alumno ". Por otra parte, añade que "el proyecto nos ha ayudado a fomentar la capacidad crítica y a exprimir las diversas cualidades de cada uno".

 

El proyecto responde al concepto de aprendizaje servicio (ApS), una metodología educativa que combina procesos de aprendizaje y de servicio a la comunidad en un solo proyecto bien articulado, en el que los participantes se forman mientras trabajan sobre necesidades reales del entorno con el objetivo de mejorarlo.