Hace algo más de un año que el proyecto nanoMOOCs ha empezado a caminar, y el próximo día 11 de marzo presentará sus primeros resultados. En el proyecto confluyen tres ejes principales: el diseño instruccional de los cursos, la integración de tecnologías en la plataforma nanomoocs.cat y la exploración de modelos de negocio del nuevo formato. En estos primeros meses se han podido elaborar tres cursos y seis tecnologías sobre una misma plataforma basada en open EDX.
Es una iniciativa vinculada a la comunidad
RIS3CAT Mèdia y liderada por la UPF. Aglutina un consorcio con investigadores de la UPF, la UOC, la UB y el CSIC, y expertos de las empresas Lavinia (Next Media Project), Edebé y Grupo Ormo.
Los nanoMOOCs van mucho más allá de los cursos en línea tradicionales y representan un nuevo reto educativo y formativo que explora diversos mercados
La oferta de los primeros nanoMOOCs estará disponible a partir del mes de junio, y se irá enriqueciendo a partir de las propuestas recibidas por parte de universidades y organizaciones que vean en este nuevo formato una manera de crear píldoras formativas tan focalizadas como efectivas. Por tanto, el proyecto abre, durante el 2021, la posibilidad de recibir propuestas de nanoMOOCs que permitirá ampliar la oferta actual.
La monetización del nuevo formato forma parte también de los objetivos del proyecto que se trabajarán este año. El hecho de disponer de certificación de los cursos a través de tecnologías blockchain permitirá idear diferentes modelos de negocio más allá de los tradicionales basados en el pago por emisión de certificados.
Las tres primeras propuestas formativas
El análisis de problemáticas medioambientales (¿Qué podemos hacer con los plásticos vertidos al mar?) es una de las propuestas formativas que pronto se difundirán y que va dirigida preferentemente a un público adolescente de los últimos cursos de secundaria. El nanoMOOC integrará tecnologías de gamificación avanzada y evaluación por competencias, entre otros, y está liderado por Edebé.
Ayudar al pequeño comercio ofreciendo un nanoMOOC de formación básica (
Please, come in!) en inglés es la segunda propuesta. La UOC, a través de su Centro de Idiomas Modernos invita, de manera muy lúdica, a aprender cómo atender de manera natural y distendida un turista que entra en un restaurante o en una tienda, ofreciendo unas competencias básicas en inglés. El curso integrará tecnología de captación de emociones, además de herramientas de gamificación que flexibilicen el aprendizaje.
Finalmente, la tercera propuesta de nanoMOOC (
De los anuncios a la mesa: salud y felicidad como estrategia en la publicidad alimentaria) se centra en el análisis de las diferentes herramientas que utiliza la publicidad para llegar a los consumidores, así como el discurso publicitario en relación a las propiedades nutricionales del producto y la estrategia publicitaria seguida. El curso, liderado por la UPF, integrará también tecnología de captación de emociones, además de herramientas de gamificación que flexibilicen el aprendizaje.
Su esencia: contenido muy concreto y en un tiempo breve
Los nanoMOOCs provienen de la hibridación de los Massive Open Online Courses (MOOC) que ya hace unos años han inundado Internet y revolucionado el aprendizaje en línea. De los primeros MOOC, "largos en duración y densos en contenidos, hemos aprendido que acortándolos y centrándonos solo en una competencia podemos hacer que el proceso de aprendizaje sea mucho más efectivo", explica Miquel Oliver, coordinador del proyecto y profesor del Departamento de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (DTIC) de la UPF. Esta es la particularidad central del nanoMOOC: centrarse en un contenido muy concreto (una competencia) y un tiempo breve (una semana).
Un formato innovador que incluye módulos tecnológicos avanzados como el detector de emociones
Aparte del formato breve, el nanoMOOC también incluye módulos tecnológicos avanzados como el detector de emociones, a partir de técnicas de visión por computador. También prevé la certificación con blockchain, la aplicación de la inteligencia artificial o la gamificación avanzada, además de contenidos de alta calidad. Por lo tanto, los nanoMOOCs van mucho más allá de los cursos en línea tradicionales y representan un nuevo reto educativo y formativo que explora diversos mercados.
En el marco del proyecto, cofinanciado por ACCIÓ, se trabajará en cuatro experiencias piloto en ámbitos formativos que van desde el turismo experiencial, la nutrición y la salud, pasando por el pequeño y mediano comercio y la educación STEM o la producción y el consumo de transmedia. De hecho, pronto se abrirá un llamamiento para la creación de nanoMOOCs entre los expertos de las organizaciones participantes en el proyecto.
Incluye módulos tecnológicos avanzados como el detector de emociones, a partir de técnicas de visión por computador. También prevé la certificación con blockchain, la aplicación de la inteligencia artificial o la gamificación avanzada
Las empresas que forman parte del consorcio ven los nanoMOOCs como elementos que añaden valor a productos digitales existentes o simplemente como posibles nuevos productos o líneas de negocio a explotar. Entre otros, por lo tanto, el proyecto también tiene como objetivo idear modelos para monetizar este nuevo formato audiovisual.
El proyecto nanoMOOCs forma parte de Comunidad RIS3CAT Media que agrupa treinta y cinco empresas, administración, centros tecnológicos y universidades alrededor de las industrias culturales y creativas. Impulsará ocho proyectos que hasta 2023 incidirán en distintos ámbitos como la Inteligencia Artificial, el análisis de datos, la hiperpersonalització, la ciberseguridad y el desarrollo de nuevos formatos, entre otros. La ejecución de los ocho proyectos percibirá una ayuda de 6 millones de euros por parte del Gobierno de la Generalidad de Cataluña, concedidos a través de ACCIÓ.
