La inclinación ideológica de los medios de comunicación es un recurrente debate en las sociedades democráticas. Más allá de los mitos sobre su neutralidad, como era el caso, según Schiller, de los medios estadounidenses durante la segunda mitad del siglo veinte, es una evidencia de que las empresas que se dedican a la difusión de información, desde la prensa escrita (digital) en las radios y las televisiones, tienen, en general, un marcado perfil político e ideológico (Gaebler, 2017).

Este hecho contrasta con los criterios de objetividad y rigor que forman parte del argumentario de legitimación de la función social del sector. Las diferencias entre países son notables y han seguido, al menos hasta hace poco, el clásico esquema presentado por Hallin y Mancini. Según estos autores, el Estado español estaría incluido en el modelo mediterráneo o pluralista polarizado, caracterizado por la inclinación política de los medios, la poca profesionalidad de los periodistas y su instrumentalización con fines políticos.

Más allá de las dudas que pueda generar esta clasificación, el sistema mediático español sigue estando marcado por un profundo partidismo que puede condicionar la percepción que tiene un ciudadano de la realidad. Este partidismo se ha analizado desde distintos puntos de vista: desde el análisis de la estructura de la propiedad y las relaciones económicas y políticas de las empresas, hasta el análisis (crítico) del contenido y de la recepción. En este sentido, vale la pena señalar el trabajo de Schena, Almiron y Pineda (2018) que clarifica el concepto de ideología y realiza un análisis de contenido para clasificar los medios ideológicamente.

El sistema mediático español sigue estando marcado por un profundo partidismo que puede condicionar la percepción que tiene un ciudadano de la realidad. Este partidismo se ha analizado desde distintos puntos de vista

Las redes sociales se han convertido en un valioso instrumento para la búsqueda de las interacciones entre medios, política y ciudadanía. La investigación The ideology of media. Measuring the political learning of Spanish news media through Twitter users’ interactions, publicada recientemente en la revista Communication & Society de la Universidad de Navarra utiliza precisamente los datos de Twitter para identificar cuál es la tendencia política de los principales medios españoles. Utilizando un método de cálculo de intersecciones entre comunidades de repiuladores, y valiéndose de los datos de los debates en la red social de las elecciones generales de noviembre de 2019, la investigación propone una medida de la inclinación ideológica de los medios.

El resultado final, que se sirve también de la percepción ciudadana de la ideología de los diferentes partidos españoles publicada en el CIS, presenta un sector acusadamente polarizado, con un gran número de medios en el polo o cluster de la derecha política, una estructura similar para el izquierda, y un número muy reducido de medios, entre ellos la Vanguardia, el País o la agencia EFE, que se sitúan en una posición ideológica neutral. Por lo general, estos resultados confirman las conclusiones de investigaciones anteriores con métodos diferentes, así como algunas de las percepciones populares sobre los sesgos ideológicos de la prensa y los medios en general en el Estado español.

El resultado final presenta un sector acusadamente polarizado, con un gran número de medios en el polo o clúster de la derecha política, una estructura similar para la izquierda, y un número muy reducido de medios que se sitúan en una posición ideológica neutral

Este trabajo, que maneja cuatro medidas distintas de similitud en el cálculo de intersecciones de comunidad de repiuladores, asigna, pues, un valor ideológico a cada medio relacionado con el que publica el CIS. A pesar de haber limitaciones y sesgos fruto de la naturaleza de la muestra, o del propio método, es una medida indirecta sin más intervención del investigador que la identificación de las comunidades de usuarios que replican contenido político y contenido de los medios, con una única suposición sobre el comportamiento ideológicamente coherente de los usuarios en la difusión de información política.

Este trabajo es, pues, una contribución más al análisis de la ideología y el partidismo de los medios que puede ayudar a la clarificación de una cuestión que, tanto la academia como la ciudadanía, debate y se plantea constantemente.