No todo son fake news. Las redes sociales están jugando un papel fundamental en la crisis del coronavirus. La declaración de pandemia y el consecuente confinamiento de las poblaciones de una gran parte de países del mundo las han convertido en instrumentos indispensables de interacción, y en una fuente primaria de acceso a la información. Twitter, la red que es considerada la óptima para el acceso a la información en tiempo real -sobre todo de carácter político, de crisis y emergencias-, se ha convertido de nuevo uno de los entornos digitales más utilizados por la población confinada para acceder a información del #COVID-19 y compartirla. Pero también para expresar opiniones, actitudes, inquietudes y temores, y para articular acciones colectivas como los agradecimientos al personal sanitario, las caceroladas, y las protestas contra instituciones.
Twitter, la red que es considerada la óptima para el acceso a la información en tiempo real se ha convertido de nuevo uno de los entornos digitales más utilizados por la población confinada para acceder a información del # Covidien-19 y compartirla. Pero también para expresar opiniones, actitudes, inquietudes y temores, y para articular acciones colectivas.
No todo son fake news. No todo son insultos y discusiones desagradables. En Twitter se comparte conocimiento, se debate sobre las medidas tomadas por los gobiernos, sobre el #ConfinamientoTotal, y sobre la gravedad de la pandemia; se comparten los datos diarios de la incidencia del #coronavirus, se critican los comportamientos irresponsables, a la vez que se piden soluciones razonables al confinamiento. Y, por encima de todo, encontramos la expresión de las emociones y la compartición de la terrible experiencia de tener que estar cerrado irremediablemente, y de las opciones más creativas, entretenidas y educativas para hacer más ligero el confinamiento con nuestros niños. Y todo ello, combinado con humor, a veces sarcasmo, también indispensable como válvula de escape de la incertidumbre y el sufrimiento experimentados.
No todo son fake news. Twitter es hoy uno de los entornos utilizados por el personal docente para preparar y compartir sus materiales en línea, un instrumento de articulación de conocimiento y de sustitución de las actividades presenciales. A través de Twitter, #AlaUPFnoparem, ni pararemos. No paramos los docentes, como no para el personal de adminstración y servicios. Muchas otras universidades, instituciones y organizaciones de todo tipo, han adoptado Twitter como herramienta indispensable para hacer frente al confinamiento, y permitir a nuestro alumnado continuar formándose desde la distancia.
A ello dedicaremos muchos de los esfuerzos de los próximos años. En el estudio de los comportamientos derivados de situaciones de crisis, emergencias y pánico, de la ansiedad y las repercusiones psicológicas del confinamiento, pero también de todas las estrategias de gestión de la crisis por parte de las instituciones, y al éxito o fracaso de las campañas comunicativas realizadas.
Y será también un instrumento indispensable para saber cómo reaccionamos los individuos y las sociedades en situaciones como estas. A ello dedicaremos muchos de los esfuerzos de los próximos años. En el estudio de los comportamientos derivados de situaciones de crisis, emergencias y pánico, de la ansiedad y las repercusiones psicológicas del confinamiento, pero también de todas las estrategias de gestión de la crisis por parte de las instituciones, y al éxito o fracaso de las campañas comunicativas realizadas. Y, por último, en el estudio de las soluciones imaginativas que sectores tan afectados como el del arte y la cultura, entre muchos otros, han creado para hacer frente a la situación derivada de la cancelación de todo tipo de actividad colectiva.
No todo son fake news. En tiempo de distanciamiento social forzoso, de imposibilidad de participar en redes sociales físicas, Twitter, una red social digital, nos acerca, nos ayuda a superar la experiencia colectivamente, y nos enseña que, más allá de las actitudes y los comportamientos irresponsables y malintencionados, la red nos da la oportunidad de hacer más llevadera la pandemia del # Covidien-19, de interactuar, de aprender, de acceder a recursos, de continuar con parte de nuestras actividades y de expresar nuestros deseos y esperanzas que todo esto termine lo antes posible.
