Vanessa Debiais-Sainton, jefa de la Unidad de Educación Superior de la Comisión Europea

En los próximos años, veremos el 2020 como una cuenca hidrográfica, no sólo en nuestra manera de vivir y trabajar, sino también en cómo aprendemos. Aunque sabemos que no habrá retorno a la educación superior de hace seis meses, aunque no estamos seguros de cómo será el futuro, ni siquiera este curso académico.

Aunque, sin duda, nos conlleva retos, este cambio disruptivo nos ofrece oportunidades para considerar la transformación que nos gustaría ver en el ámbito de la educación superior. Por lo tanto, ahora que empezamos un nuevo curso académico, me gustaría compartir la visión de la Comisión Europea sobre la transformación de la educación superior y exponer como la conseguiremos.

En primer lugar, la visión: la visión que tiene la Comisión es la de una educación superior inclusiva y excelente, en la que la docencia, la investigación, la innovación y el servicio a la sociedad trabajen en armonía, tanto para crear un futuro más brillante para los estudiantes, investigadores y personal, como para encontrar soluciones a retos globales, tales como la sostenibilidad ambiental, la transformación digital y la cohesión social.

¿Y cómo llegaremos hasta aquí?

En la Comisión Europea, nos aproximamos a la educación superior de manera integral, aplicando las lecciones aprendidas de la Covid-19; pero también irá más allá, para potenciar la transformación de la educación superior en toda Europa. Pensamos que el sector de la educación superior tendrá un papel esencial en la recuperación del impacto de la Covid-19, así como en la consecución de prioridades globales europeas y mundiales, como el Tratado Verde Europeo y los objetivos de desarrollo sostenible (ODS) de las Naciones Unidas.

En este sentido, la Comisión Europea ha publicado recientemente su visión para alcanzar el espacio europeo de educación en 2025, que anuncia varias iniciativas para transformar la educación superior, que pretendemos cocrear con las comunidades de enseñanza superior y de investigación. También ha publicado un plan de acción de educación digital actualizado, que sacará lecciones de la experiencia a raíz de la Covid-19, al tiempo que abrirá el camino a la educación digital europea.

Para acelerar una cooperación más profunda entre las 5.000 instituciones de educación superior de Europa, presentaremos propuestas sobre garantía de calidad y un título europeo, que abrirán el camino a formatos de movilidad más innovadores, incluyendo elementos digitales.

También nos centraremos en el aprendizaje permanente. Necesitamos opciones innovadoras y diversificadas, que incluyan el aprendizaje digital y combinado. Por este motivo, desarrollaremos un enfoque europeo de microcredenciales, que apoyará su uso, la portabilidad y un reconocimiento más amplios.

Otro aspecto clave de la agenda de transformación es la inclusión. Hay demasiadas personas que no participan en la educación superior por motivos sociales, culturales o económicos, o por un apoyo y una orientación insuficientes. Debemos asegurarnos de que los estudiantes que entran y que se gradúan en la enseñanza superior reflejen la diversidad de las poblaciones europeas.

Los modelos a seguir para nuestra agenda de transformación de la educación superior son las 41 universidades europeas, formadas por más de 280 instituciones de enseñanza superior y que cuentan con el apoyo de los programas Erasmus + y Horizon 2020. 

Los modelos a seguir para nuestra agenda de transformación de la educación superior son las 41 universidades europeas, formadas por más de 280 instituciones de enseñanza superior y que cuentan con el apoyo de los programas Erasmus + y Horizon 2020, que están desarrollando nuevos modelos de cooperación sostenible y que reunirán una nueva generación de europeos capaces de cooperar y de trabajar desde diferentes culturas europeas y globales sobre los mayores retos sociales de nuestro tiempo, en diferentes idiomas y a través de fronteras, sectores y disciplinas académicas. Para impulsar esta iniciativa, examinaremos la viabilidad de un estatuto europeo para alianzas como las universidades europeas.

Aunque la enseñanza superior se enfrenta a muchos retos, tenemos una oportunidad real de trabajar juntos compartiendo nuestras visiones de futuro. Tengo ganas de colaborar con estudiantes, profesores, investigadores y personal durante el próximo año mientras cocreamos esta agenda de transformación de la educación superior.