Un conjunto de hasta ocho organizaciones clave en los sectores de la investigación pública y la educación superior ha enviado una carta abierta a Ilze Juhansone, secretaria general de la Comisión Europea, instándola a mejorar los esfuerzos para integrar las necesidades y preocupaciones del mundo de la investigación y la educación superior en las directivas de la Comisión. The Guild, la alianza que agrupa a 22 universidades intensivas en investigación, entre las que participa la Universitat Pompeu Fabra, es una de las firmantes, junto con la Asociación Europea de Universidades y Knowledge Rights 21, entre otras.

En el comunicado, se expresa que, "demasiado a menudo", se presentan regulaciones y directrices con importantes consecuencias para las universidades, los centros de investigación y las personas que trabajan en ellos, sin tener en cuenta estas implicaciones. "No tomar medidas para cambiar esto significa que Europa perjudicará a sus investigadores, estudiantes, innovadores y ciudadanos en general", asegura el mensaje dirigido a la Comisión.

La declaración ejemplifica con la Ley de Servicios Digitales, que afecta la sostenibilidad económica de las organizaciones públicas, ya que no las exime de las obligaciones diseñadas para prevenir la posición de poder en el mercado de plataformas comerciales: "El uso de los depósitos digitales de los centros solo pretende respaldar sus actividades de investigación y enseñanza", asegura.

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La carta propone pasos concretos, incluyendo una revisión del Principio de Innovación de la Unión, actualmente centrado solo en la investigación del sector privado, así como una actualización de sus herramientas para la evaluación de impacto y una mejor comunicación tanto entre los servicios de la Comisión Europea como con los interesados. Finalmente, insta a tomar medidas rápidamente para corregir las incertidumbres causadas por la legislación reciente.

El comunicado recoge las declaraciones de Ole Petter Ottersen, secretario general de The Guild, que alerta sobre la necesidad de evaluar ex ante los efectos negativos que las regulaciones europeas puedan tener para las universidades: "Es necesario tener en cuenta la investigación y la educación ante nuevas propuestas legislativas, ya que las nuevas leyes y regulaciones pueden tener efectos no deseados e inesperados sobre las universidades".