Artículo publicado en el Ara el 21 de abril de 2023

El riesgo de una crisis financiera es real. Si recurrimos a la investigación académica que se ha hecho al respecto, se afirma que la probabilidad de que se produzca una crisis aumenta después de un período largo con tipos bajos, y que la intensidad de esta crisis es proporcional a la de cambios de tipos. En Europa se cumplen las dos premisas: nueve meses de subidas del tipo de interés después de más de una década de bajos intereses.

La subida de intereses actúa como un elemento disruptivo en el sistema financiero, que busca reequilibrarse. Por nombrar algunas: inversiones que eran rentables dejan de serlo y hay que buscar nuevas, contracción de las inversiones y del crédito y un posible aumento de las quiebras empresariales o impagos hipotecarios. Todo un sistema que debe reajustarse y encontrar el equilibrio de nuevo. Como cuando se echa una piedra en un lago.

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