Artículo publicado en el Diari de l'Educació el viernes 28 de abril de 2023 

Hasta no hace mucho, el desarrollo del lenguaje se había centrado exclusivamente en el análisis del habla. Aun así, a pesar de que esta visión tradicional del lenguaje todavía se mantiene, hay que tener presente que, cuando nos comunicamos, no solo lo hacemos a través del habla, sino que también usamos otros elementos comunicativos, como son los movimientos o gestos de las manos, de la cabeza, del cuerpo y de las expresiones faciales. La combinación de ambas modalidades (oral-auditiva y visual-gestual) es lo que denominamos “multimodalidad” (o “lenguaje multimodal”) y es esencial estudiarla para entender el valor que tienen los movimientos de nuestro cuerpo y nuestra voz en la comunicación y cognición humana, especialmente en el desarrollo del lenguaje.

Precisamente, acaba de tener lugar el 1er Simposio Internacional de Comunicación Multimodal (MMSYM) en el campus del Poblenou de la UPF. Uno de los temas que se tratado es el desarrollo del lenguaje multimodal entre los niños, que se produce en paralelo a la adquisición de otras habilidades comunicativas y lingüísticas. Los niños empiezan a usar el gesto de señalamiento antes de producir sus primeras palabras. Meses más tarde, se empiezan a adquirir otros hitos clave del desarrollo multimodal del lenguaje, como la producción de gestos icónicos alrededor de los 2 años (aquellos que representan información semántica del habla, por ejemplo sobre un objeto o una acción); la producción de los gestos no referenciales (no representan lo que se está diciendo, sino que enfatizan una información clave del discurso); u otras habilidades lingüísticas más complejas (por ejemplo, el discurso narrativo), alrededor de los 4 o 5 años. Así mismo, se ha demostrado que las poblaciones con Trastornos del neurodesarrollo -como el Trastorno del desarrollo lenguaje (TDL) o el Trastorno del espectro autista (TEA)- muestran patrones gestuales atípicos al comunicarse.

Investigaciones previas demuestran que el hecho de que los niños, con o sin patología, observen y produzcan gestos tiene un impacto directo en su desarrollo, cosa que muestra la eficacia de la multimodalidad en la mejora de diferentes habilidades lingüísticas y cognitivas de los niños. En nuestras investigaciones, estudiamos el impacto que tiene la comunicación multimodal en la adquisición y desarrollo del lenguaje. En estudios recientes, hemos llevado a cabo intervenciones de narrativa oral que potencian de forma explícita la multimodalidad y las hemos validado científicamente a través de la investigación educativa y clínica. Por un lado, a través de los resultados obtenidos de dos intervenciones narrativas breves, mostramos los efectos inmediatos de observar y producir gestos no referenciales en las habilidades narrativas orales de niños y niñas de 5 a 6 años. Por otro lado, también se han obtenido resultados muy positivos en un programa de intervención que hemos aplicado tanto a nivel grupal, en aulas con niños y niñas de entre 5 y 6 años, como a nivel individual con niños y niñas con TDL y TEA, de entre 3 y 7 años. Después de 9 sesiones para potenciar la multimodalidad en la narración de cuentos en estos dos tipos de contexto, se han observado mejoras significativas en las habilidades no solo narrativas, sino también sociocomunicativas de estos niños.

En conclusión, los adelantos de la investigación en este campo indican que es esencial que el estudio sobre el desarrollo y aprendizaje del lenguaje adopte esta perspectiva multimodal de la comunicación humana.

Ingrid-Vilà-Giménez*, Júlia Florit-Pons, Alfonso Igualada** y Pilar Prieto, Grupo de Estudios de Prosodia y Gestualidad (GrEP) 

Departamento de Traducción y Ciencias del Lenguaje de la UPF 

*Vinculada al Grupo de Investigación en Educación Científica y Ambiental UdG / **Vinculado al Grupo de Investigación en Cognición y Lenguaje UOC