Jordi Albiol Plans forma parte de la primera promoción de Derecho de la UPF (1994), y recientemente asistió a un encuentro en el campus de la Ciutadella organizado por el servicio UPF Alumni, con motivo del vigésimo aniversario de su graduación. Actualmente es socio del prestigioso bufete de abogados Rousaud Costas Duran (RCD), del que es responsable del área de Derecho Concursal.

Licenciado en ADE y doctor en Derecho por la Universidad Abat Oliva-CEU, es presidente de la Sección Mercantil Concursal y Actuaciones Judiciales del Colegio de Economistas de Cataluña y profesor de Derecho Mercantil de la Universidad de Barcelona.

-¿Cómo viviste el reencuentro con los compañeros de la primera promoción de Derecho?

La verdad es que con mucha ilusión. Es emocionante reencontrarse con personas que han formado parte de tu etapa universitaria y compartir recuerdos pasados y vivencias actuales. ¡Es como volver de golpe al pasado y revivir como si fuera ayer tus años de estudiante!

-¿Qué recuerdos guardas de tu paso por la UPF?

Fue una época muy estimulante; no dejas de aprender y empiezas a adentrarte en una profesión tan apasionante como el derecho, donde cada día se te plantea un nuevo reto. Recuerdo el buen nivel de los profesores, la exigencia que imponían y que es tan necesaria a lo largo de la profesión. Personalmente, tengo el recuerdo de una etapa muy dulce durante la que amplié mi círculo social y empecé a hacerme adulto.

-En veinte años, ¿ha evolucionado mucho el ámbito del derecho concursal?

El derecho concursal ha cambiado mucho a lo largo de este periodo; la ley concursal ha sido sometida a muchas reformas en los últimos años a raíz de la crisis. Por poner un ejemplo: sólo en 2014 ha habido tres reformas. Lo más destacable, sin embargo, es el cambio de percepción en la sociedad: antes, el concurso era un estigma, incluso su antigua denominación "suspensión de pagos" tenía connotaciones más negativas. En la actualidad, y desgraciadamente después de los numerosos procesos concursales de los últimos años, la percepción sobre estos procedimientos ha comenzado a cambiar.

"Antes, el concurso era un estigma, incluso su antigua denominación 'suspensión de pagos' tenía connotaciones más negativas"

- ¿Se ha frenado el boom de procedimientos concursales relacionados con la crisis?

En el último año se ha frenado un 40% y comienza a notarse una cierta estabilización. Podríamos decir que ya hemos tocado fondo y que ahora empezamos a construir las bases de la recuperación.

-¿Qué consejos básicos dais a vuestros clientes ante una crisis empresarial?

Lo primero de todo es hacer un análisis para tener un buen diagnóstico de la situación actual. Es importante contar con el asesoramiento de expertos, que puedan aportar una visión objetiva y rigurosa y aconsejar sobre la opción de continuidad más idónea. Y hacerlo a tiempo, porque demorarnos mucho puede ir en contra de nuestros intereses.

-¿Las nuevas tecnologías han ayudado a agilizar los procedimientos concursales?

En general, las nuevas tecnologías han ayudado a agilizar algunos procesos de la justicia. La vía telemática ha acortado la duración de trámites que ahora son inmediatos y que antes podían tardar días; pero aún queda mucho por hacer. En el caso particular del área concursal hay mucha comunicación con los acreedores de las empresas a través del correo electrónico; se ha convertido en una herramienta esencial e indispensable.

-¿Cómo crees que un emprendedor debe asumir una apuesta empresarial no exitosa?

Primero de todo, darse un tiempo para digerir la situación. Como en cualquier duelo, se necesita un tiempo de recuperación para afrontar nuevos retos. Las empresas pueden acabar en quiebra por muchas razones y se pueden sacar muchas lecciones: tanto de las buenas prácticas como de los aspectos más débiles que han marcado el final del proyecto.

"Las empresas pueden acabar en quiebra por muchas razones y se pueden sacar muchas lecciones: tanto de las buenas prácticas como de los aspectos más débiles"

-Los tres últimos años la prestigiosa publicación norteamericana Best Lawyers te ha incluido en su directorio de mejores juristas en el ámbito de la insolvencia y la reorganización. ¿Como lo valoras?

Para mí es todo un honor ser incluido en estos directorios; reconoce no sólo mi trabajo sino la de un equipo de quince profesionales que dan lo mejor de sí mismos. Creo que es el resultado de un buen trabajo en equipo, del área concursal de RCD y, en general, de todo el despacho.

-Rousaud Costas Duran colabora en el II Foro de Inversión UPF 2014, en el que se presentarán diferentes proyectos tecnológicos surgidos de la Universidad. ¿Qué aporta al bufete participar en este tipo de encuentros?

En RCD tenemos una apuesta clara por el asesoramiento y el impulso a nuevos proyectos que aporten valor a nuestra sociedad, ya que liga mucho con nuestro talante innovador. Hace once años, fuimos el primer despacho en crear un área de innovación y emprendimiento, dirigida por Ignasi Costas, antiguo alumno de la UPF. Creemos que el II Foro de Inversión UPF es un buen punto de encuentro entre el talento, la creatividad y un capital que busca nuevos proyectos interesantes. Nos gusta ofrecer nuestra experiencia y conocimiento para ayudar a emprendedores e inversores a conseguir el éxito en sus proyectos, y es todo un honor y un privilegio poder estar presentes.