Erika Bullock, project manager de la Standford d.school

En 2015, el Hasso Plattner Institute for Design de la Universidad Stanford, conocido generalmente como la d.school, lanzó el Stanford 2,025 Project. Alentados por la explosión de la educación en línea y los costes crecientes de los estudios universitarios en Estados Unidos, los educadores y diseñadores de la d.school comenzaron a preguntarse cómo podría ser la educación superior en los Estados Unidos -y, en particular, la experiencia de estudiar en la universidad- a los diez años.

Para imaginar posibles escenarios de futuro, primero miramos hacia adentro, preguntando a los estudiantes, a los profesores y al personal de administración de Stanford sobre sus experiencias en la educación superior. El Proyecto 2025 surgió con cuatro ideas provocativas sobre el futuro de la educación superior. Se trataba de ideas como Open Loop University (Universidad de Ciclo Abierto), en el que los estudiantes entran y salen de su formación superior a lo largo de su vida, dejando la universidad para aprovechar otras oportunidades y entretejiendo las dos cosas con sus viajes a la educación superior. Otras ideas, como Purpose Learning (Aprendizaje Funcional) imaginan un futuro en el que los estudiantes declaran misiones, y no especialidades, cuando entran en la universidad.

La respuesta que recibimos en Stanford 2025 fue igualmente provocadora. Supimos de profesores, estudiantes, administradores y personal de las universidades de todo el país y del mundo que estaban probando sus propios experimentos. Algunos querían saber cómo debían implementar estructuras como el Open Loop a la propia universidad, mientras que otros compartían historias sobre la creación de nuevas universidades desde cero. Al conectar con estos líderes de la educación nos dimos cuenta que había muchas más cosas por descubrir sobre el futuro de la educación superior. Y entonces surgió una nueva pregunta: ¿cómo se concretan, en realidad, los proyectos que imaginan una nueva dirección de la educación en el mundo?

Ahora, cinco años después de las provocaciones de Stanford 2025, se ha revisado el proyecto con Stanford 2025: Uncharted Territory (Stanford 2025: Territorio No Cartografiado) para dar respuesta a esta pregunta y recoger historias sobre algunos de los principales actores que actualmente están cambiando la educación superior sobre el terreno. En los doce estudios de caso que recogimos (mediante entrevistas a empresarios del ámbito de la educación, profesores, administradores, rectores de universidad y estudiantes) vimos paralelismos con las provocaciones de Stanford 2025, y muchas ideas nuevas también.

Hemos sabido que hay instituciones de larga trayectoria, como la Universidad de Georgetown, en Washington, DC, que está desarrollando una iniciativa, Diseñar el (los) Futuro (s), en la que utiliza bloques de construcción institucionales -como horas de crédito, secuencias de cursos y ofertas de cursos modulares- para imaginar un plan de estudios de grado más flexible y adaptativo. Hablando con los líderes del College Unbound, en Rhode Island, supimos que están desarrollando un título universitario centrado en los estudiantes y destinado a estudiantes adultos que ofrece un apoyo que va desde los servicios de guardería para niños hasta la evaluación de los aprendizajes previos, de modo que los estudiantes puedan encajar cómodamente su identidad de estudiantes en el resto de sus vidas. En el Instituto Maharishi, de Sudáfrica, nos explicaron que están educando estudiantes con antecedentes de traumas y pobreza cambiando la jerarquía de necesidades de Maslow, es decir, situando la autorrealización en el centro del plan de estudios; así, los estudiantes comienzan cada día con una práctica de meditación y de yoga antes de zambullirse en sus estudios. En la Western Governors University los estudiantes siguen un recorrido académico dirigido completamente en línea, y se mide su progreso en competencias, no en créditos. Ante un futuro incierto tanto para la educación superior como para sus estudiantes, estas instituciones están trazando nuevos caminos de futuro.

Las historias que se recogen en Uncharted Territory son ideas que pensamos que han ido un paso más allá y han alentado a los líderes de la educación superior a imaginar de manera diferente. Y sabemos que nuestros casos de estudio son sólo algunos ejemplos entre muchos. Esperamos que Uncharted Territory continuará dando lugar a un diálogo importante y oportuno, que aliente a los líderes de la educación a imaginarla con audacia y construir de manera creativa un futuro de la educación superior para todos.

Para leer más sobre Uncharted Territory y sobre los estudios de caso y para descargar una copia gratuita de PDF, consulte el sitio web de d.school.