Eliud Quintero, doctor en Innovación Educativa. Ha trabajado como especialista en tendencias educativas, especialista en diseño y desarrollo curricular, conferenciante y formador docente. Actualmente, es el director de la Licenciatura en Innovación Educativa del Instituto Tecnológico de Monterrey.

La innovación del currículo universitario ha dejado de ser una opción y se ha convertido en una necesidad latente y prioritaria. Ante un mundo cada vez más complejo, incierto e hiperconectado la formación de profesionales debe hacer frente a los grandes problemas globales y más aún, a aquellos que aún no visualizamos como desafíos. La nueva propuesta de desarrollo profesional del Tecnológico de Monterrey, parte de cuáles serán las habilidades y conocimientos que serán requeridas para afrontar los retos del siglo XXI, en lugar del tipo de “temas o asignaturas” que deben ser enseñadas y aprendidas.

El Modelo Tec21 consta de 4 elementos diferenciadores: 1) el aprendizaje basado en retos como estrategia para el desarrollo de competencias, 2) la flexibilidad curricular, 3) el perfil del profesor inspirador y 4) una vivencia memorable. La oferta del nuevo modelo educativo integra una experiencia personalizada y flexible sobre el qué, cómo, cuándo y dónde de la formación de pregrado. La oportunidad de explorar contenidos de distintas disciplinas, previo a la toma de decisión de una carrera, con la intención de que cada estudiante pueda tener más elementos antes de decidir o bien, elegir la concentración o especialidad de acuerdo a sus intereses son parte de la flexibilidad curricular.

Para abordar lo anterior, la estructura curricular de cada carrera profesional se desarrolla a través de 3 fases: una etapa de exploración por entrada (negocios, medicina, ingeniería y ciencias, ciencias sociales y gobierno y estudios creativos) en la que ocurre el desarrollo de competencias comunes a las carreras de dicha entrada; una etapa de enfoque en la que se desarrollan las competencias propias de cada carrera, mismas que las distinguen del resto de las que conforman la entrada y una etapa de especialización en la que el estudiante puede complementar y orientar su formación con alguna de las concentraciones o bien, tener una experiencia internacional.

La estructura curricular del Modelo Tec21 no sólo contempla materias, de hecho, presenta distintas unidades de formación como los bloques, las semanas Tec y los semestres Tec. Gracias a los bloques y los semestres Tec, los alumnos de todos los programas profesionales, pueden desarrollar competencias mientras participan en la solución de retos reales en empresas, industrias, fundaciones, gobierno, sociedad civil, etc., al tiempo que reciben la orientación y el acompañamiento por parte de sus profesores. A su vez, espacios como las semanas Tec permiten a los estudiantes tener actividades diseñadas por otras áreas y programas para complementar su formación de acuerdo a sus intereses.

El rediseño del Modelo Tec21 ha sido un proceso extenso, intenso y complejo tomando como base el desarrollo de una cultura de cambio e innovación académica y administrativa.