Arqueólogos, antropólogos y genetistas trabajarán codo con codo en el análisis de varios yacimientos arqueológicos de Cataluña. El proyecto se pondrá en marcha este mes de julio y estudiará restos arqueológicos de hasta 7000 años de antigüedad mediante el uso de las técnicas de secuenciación genética más avanzadas. El equipo multidisciplinar está formado por investigadores de la Universidad Pompeu Fabra, el Instituto de Biología Evolutiva (IBE, CISC-UPF), la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB) y las empresas Antropólogos LAB y Tríade Serveis Culturals, y cuenta con la colaboración del Instituto de Estudios Catalanes (IEC).

La escasa cantidad de ADN que se obtiene de las muestras, su mal estado de conservación y la contaminación con ADN de otros organismos o de cualquier persona que haya estado en contacto son algunas de las dificultades que presenta el estudio genético de muestras arqueológicas. Mientras que las nuevas técnicas de análisis genético ya se aplican de manera rutinaria a muestras actuales, en el caso de los restos antiguos ha sido necesario llevar a cabo un proceso de optimización de la tecnología. 

“La mejora en las técnicas de secuenciación masiva de ADN nos permitirá analizar detalladamente los yacimientos, que corresponden a épocas comprendidas entre el Neolítico y la primera edad de hierro”, comenta Ferran Casals, jefe del Servicio de Genómica de la UPF. “Con estos métodos se obtiene mucha más información y más detallada que con las técnicas utilizadas hasta ahora, ya que analizan un mayor número de regiones genómicas”, señala Assumpció Malgosa, catedrática de Antropología Física y jefe del Grupo de Investigación en Osteobiogografia de la UAB.

El estudio se llevará a cabo, entre otros, en los yacimientos de la Cova dels Voltors o de Montanissell (Alt Urgell) y los sepulcros de Mas d'En Boixos (Barcelona), y permitirá profundizar en las relaciones de parentesco entre los individuos, los niveles de consanguinidad y diversidad genética y el origen de algunos individuos. “Estos resultados, junto con los datos arqueológicos y antropológicos, ayudarán a comprender aspectos culturales, sociales y poblacionales de los habitantes de Cataluña en diferentes épocas prehistóricas”, concluye Jaume Bertranpetit, catedrático de Biología Evolutiva en la UPF, jefe del Grupo de Investigación en Biología de Sistemas Evolutivos del IBE (CSIC-UPF) y miembtro del IEC.

Imagen 1: Yacimiento Ibérico de la Font de la Canya, Avinyonet del Penedès - Angela Llop

Imagen 2: Miembros del proyecto - UPF