Autoría: Carolin Adam (Nodo de la Universidad de Concepción, Chile)

Desde hace siglos el mundo ha visto un sinfín de guerras, incluyendo conflictos internos en algunos países, que han dado origen a un vocabulario específico relacionado con particularidades de estos enfrentamientos bélicos. Una de estas nuevas voces que surgió en el transcurso del siglo pasado fue paramilitar, que según el Diccionario de uso del español de América y España se emplea para describir asociaciones o personas que ‘copia[n] la organización y distintivos de cuerpos militares y [son] de ideología reaccionaria’. Esta unidad léxica también está registrada en el Diccionario de la lengua española y se refiere a organizaciones civiles que están ‘dotadas de estructura o disciplina de tipo militar’.

Dada la importancia de estas organizaciones en conflictos en varias partes del mundo a lo largo de los siglos xx y xxi, se ha observado la creación de nuevas voces sobre la base del adjetivo paramilitar. Una de estas voces es el nombre masculino paramilitarismo, creado mediante sufijación con el elemento -ismo que, de acuerdo con el Diccionario de la lengua española, se emplea para formar sustantivos que significan ‘doctrina’, ‘sistema’, ‘escuela’ o ‘movimiento’. El nombre paramilitarismo se refiere a la organización de este tipo de grupos armados, su estructura, su entrenamiento y su función, que por general operan al margen de la legalidad.

En los últimos tiempos, este neologismo se ha utilizado frecuentemente para describir las acciones de grupos armados ilegales de extrema derecha en algunos países de Centro- y Sudamérica, como Colombia, El Salvador, Guatemala y Honduras, que surgieron en los años setenta como respuesta a las guerrillas de extrema izquierda. De igual manera, también se ha empleado para describir la presencia de asociaciones similares en otros países de América Latina y África.

Como puede verse en los siguientes ejemplos, paramilitarismo, que se ha recogido de la prensa desde 2006, tiene presencia en todos los países que conforman la red Antenas Neológicas, siendo Colombia el país donde se ha registrado con mayor frecuencia:

• El gran reto del presidente será ponerle punto final al paramilitarismo, lograr un proceso de paz que los desmonte en todas sus facetas, que no signifique impunidad. [El Comercio, Perú, 6/08/2006]
• Curiosamente, los paramilitares y la oposición han coincidido en la misma interpretación: para ambos, la sorpresiva decisión de traslado es una cortina de humo para desviar la atención del caso de la alianza entre altas esferas políticas y el paramilitarismo. [El País, España, 5/12/2006]
• Chávez expresó que el gobierno de Uribe “es uno de los grandes problemas” de la región, pues, en su opinión, está comprometido “con la mentira y la manipulación”, además de “tener relación con el paramilitarismo y el narcotráfico”. [Página 12, Argentina, 17/05/2008]
• Como pretexto —prosiguió Castro— se utilizó la lucha contra el comercio de drogas que, como el terrible flagelo del paramilitarismo, surgió del gigantesco mercado norteamericano de cocaína y otras drogas. [El Mercurio, Chile, 5/11/2009]
• Las protestas contra Tres Caínes, que cuenta la historia de los fundadores del paramilitarismo, no han conseguido sacarla del aire. [El Comercio, Perú, 17/04/2013]

A su vez, paramilitarismo ha servido de base para la creación de nuevas voces. Así por ejemplo, debido a que algunas de las agrupaciones paramilitares han estado ligadas estrechamente al narcotráfico, se ha podido observar la aparición del neologismo narcoparamilitarismo, creado mediante el mecanismo de formación culta. En Colombia se conocen como narcoparamilitares a los miembros de grupos armados de autodefensa de extrema derecha fuertemente vinculados al tráfico ilícito de estupefacientes.

• Magistrados discutieron dos temas claves: la compra de votos en el Congreso para asegurar la aprobación de la reelección de Uribe, conocido como el expediente de la yidispolítica, y las investigaciones en contra de escuderos de Álvaro Uribe, incluido su primo Mario Uribe Escobar, por nexos con el narcoparamilitarismo. [El Tiempo, Colombia, 12/12/2015]

Además, en los registros de las Antenas Neológicas se ha constatado la presencia de otros tipos de formación, como derivación: ultraparamilitar, postparamilitar, paramilitarización, paramilitarista; y sintagmación: paramilitarismo de Estado.

• Reclama "el carácter político de la lucha de los verdaderos rebeldes y sediciosos", para otorgarlo "a la delincuencia común que es el paramilitarismo de Estado", y elogia a la Corte por "establecer claramente que paramilitarismo no es sedición". [La Jornada, México, 13/08/2007]

Debido a la alta frecuencia de uso de la palabra paramilitarismo y a su persistencia en la prensa, se podría pensar que este lema es un buen candidato a entrada para diccionarios generales de lengua española, tal como ya es el caso de paramilitar.

Fuente: WagnerKiyoshi (Pixabay)