El Ayuntamiento de Barcelona y la Universidad Pompeu (UPF) impulsan el Programa de Investigación Urbana de Barcelona (PRUB). Este programa, que tiene una vertiente formativa y otra de investigación, surge de la voluntad de ambas entidades de cooperar para resolver retos significativos a los que se enfrentan las ciudades y garantizar una gestión de excelencia, aprovechando el potencial de la UPF y facilitando el acceso a los investigadores de los datos abiertos de que dispone el consistorio.

En el acuerdo de colaboración firmado hoy, ambas entidades han acordado desarrollar proyectos de interés común y colaborar en el estudio, la investigación y el diseño de iniciativas relacionadas con el fenómeno urbano en su vertiente social, física y económica, profundizando en la apuesta que ha hecho la ciudad de Barcelona de liderar el ámbito de las Smart Cities. Jaume Casals, rector de la UPF, manifiesta que "pasamos de ser una universidad barcelonina, a una universidad de Barcelona, implicada en la ciudad y en los pryectos de la ciudad". Explica que "la UPF está seriamente decidida a participar y a transformarse tanto como haga falta para poder hacer de Barcelona y Cataluña un lugar mejor para vivir".

Jaume Casals, rector de la UPF, manifesta que "passem de ser una universitat barcelonina, a una universitat de Barcelona, implicada en la ciutat i en els projectes de la ciutat". D'altra banda, explica que "la UPF està seriosament decidida a participar i a transformar-se tant com calgui per poder fer de Barcelona i de Catalunya un lloc millor per viure".

Con la voluntad de dar respuesta a los desafíos que enfrentará la ciudad en los próximos años, un equipo de la UPF y el Ayuntamiento de Barcelona seleccionará en los próximos cuatro meses las primeras líneas de investigación a abordar. En este sentido, la ciudad productiva (creación de oportunidades, regeneración de tejidos urbanos, el uso de la logística en la gestión de los flujos de productos de la ciudad), la renaturalización de la ciudad compacta (reintroduciendo la naturaleza en la ciudad , reforzando los corredores verdes, repensando el papel de las zonas periurbanas), los usos del espacio público (capacidad de predecir los movimientos a pie y en bicicleta, análisis de flujos de transporte, diseños que promuevan la movilidad sostenible) y la rehabilitación energética son algunos de los ámbitos que se quieren trabajar en los próximos años.

Para dotarlo de proyección internacional e incentivar la colaboración público-privada, el programa se quiere impulsar en colaboración de centros de investigación de referencia internacional y con empresas del sector. La iniciativa se enmarca también en la estrategia RIS3 de investigación e innovación para la especialización inteligente diseñada desde Europa y concretada, también, a nivel catalán y barcelonés.

El PRUB se integrará dentro de la fundación municipal Barcelona Institute of Technology (BIT), que cuenta con una línea de acción específica relativa a "Investigación y Formación en Innovación Urbana", con el objetivo de apoyar y colaborar con universidades catalanas e internacionales en el desarrollo de la actividad de postgrado en el ámbito de las "smart cities"; desarrollar líneas de investigación en innovación urbana, investigar en nuevos servicios urbanos innovadores y modelos de negocio; y, generar talento para las futuras ocupaciones relacionadas con la innovación urbana. Para cumplir con sus objetivos, el BIT busca el impulso de colaboraciones con universidades, centros de investigación, asociaciones empresariales, empresas y emprendedores, para articular y fomentar la innovación urbana.

Formación en estudios urbanos

El acuerdo también prevé la colaboración de las dos entidades en el campo de la formación. De cara al curso 2015-16 se prevé la programación de un postgrado dirigido a profesionales de todos los ámbitos que quieran aportar soluciones innovadoras y multidisciplinares a diferentes retos de gestión urbana planteados por el consistorio.

El posgrado tendrá un carácter práctico, que utilizará la ciudad de Barcelona como laboratorio y trabajará con emplazamientos y datos reales. Los casos de estudio serán comparados con las ciudades de origen de cada uno de los alumnos internacionales.

La UPF y el Ayuntamiento de Barcelona colaborarán en la búsqueda de financiación de empresas del sector que les permita dotar a los estudios con un programa específico de becas y por el que, posteriormente, los estudiantes podrían completar su formación con prácticas en el consistorio o en una empresa del sector.

El convenio prevé una dotación económica inicial para poner en marcha el proyecto de 120.000 euros a aportar, en dos años, a partes iguales.