Los alimentos y productos light representan una oferta de la industria alimentaria que trata de dar respuesta a las expectativas de una población que ha ido ganado peso en las últimas décadas. Se considera que un producto alimenticio es light o ligero si alguno de sus nutrientes ha sido reducido como mínimo en un 30% respecto al producto original; esta reducción debe declararse en el etiquetado.

El reclamo de la etiqueta light, basado en la reducción de calorías de los productos, contiene la promesa de una inestimable ayuda para adelgazar. Lo que en su día fue una incipiente moda de lo light se ha consolidado como un hábito de consumo de productos ligeros. Sin embargo, las expectativas de pérdida de peso asociadas a estos productos no han sido confirmadas.

Mensaje incierto
El consumo de alimentos y productos light reduce el peso

Evaluación

El mensaje evaluado se considera incierto o dudoso porque no se sabe si los productos light o ligeros ayudan o no a que las personas que los consumen habitualmente realmente adelgacen, ya que no se han identificado estudios que analicen directamente este efecto. La evaluación del mensaje se ha centrado en los estudios disponibles, que se limitan a analizar algunos alimentos o productos reducidos o libres de grasas, azúcares o calorías, dentro de los cuales es posible que se incluyan algunos alimentos o productos light. En concreto, se han evaluado los efectos de dos tipos alimentos: los reducidos en grasas y los que contienen edulcorantes reducidos en calorías. En el primer caso, la evaluación muestra que es dudoso que los alimentos bajos en grasas ayuden a perder peso, mientras que en el segundo caso el consumo de alimentos con edulcorantes bajos en calorías podría ayudar a reducir ligeramente el peso