El proyecto ViBelt, que plantea soluciones tecnológicas para ayudar a superar el vértigo, ha ganado el premio a la mejor propuesta de dispositivo médico del grado en Ingeniería Biomédica de la UPF. Por segunda vez, el proyecto ganador de este concurso recibirá una ayuda de 5.000 euros del Consejo Social de la UPF, con la que se quiere facilitar su desarrollo e implementación.

Estudiantes del grado en Ingeniería Biomédica de la UPF desarrollan anualmente diseños de nuevos dispositivos médicos para mejorar el tratamiento de diferentes enfermedades y el bienestar de los pacientes, en el marco de la asignatura Introduction to Medical Devices and their Design (IMDD). Cada curso, se escoge una propuesta ganadora de entre los diferentes proyectos presentados, este año un total de cinco.

El proyecto ganador de esta edición plantea una solución tecnológica no invasiva para la rehabilitación vestibular para solventar el vértigo. El sistema vestibular es el que se encuentra en el oído interno y ayuda a mantener el equilibrio y la postura y también es determinante para controlar el vértigo. Esta propuesta la ha desarrollado el equipo de estudiantes integrado por Manal Barrouhou, Clàudia-Li Valiente, Carla Leal, Eva Maria Ferrer, Iraïs Garcés de Marcilla, Nerea González Aranceta, Daniel Patón y Judith Recober.

Judith Recober, estudiante representante del grupo del proyecto ViBelt: “Creemos que asignaturas como esta, basadas en un proyecto, son muy valiosas e interesantes para nuestra educación y experiencia”

En representación del equipo ganador, Judith Recober ha expresado la satisfacción de todas las personas que lo integran por haber podido realizar esta asignatura y este proyecto y su agradecimiento por el premio recibido: “Esta asignatura nos ha permitido trabajar y aprender con una metodología mucho más práctica, conocer de primera mano casos muy variados de gente que, a partir de una idea ha podido crear una startup, y toda su experiencia. También hemos podido aprender conceptos muy importantes, que quizás no se dan demasiado en el grado, de temas como economía, mercado y regulación, entre otros. Creemos que asignaturas como esta, basadas en un proyecto, son muy valiosas e interesantes para nuestra educación y experiencia”. Asimismo, ha agradecido el apoyo que representa este premio para seguir desarrollando este proyecto y ha transmitido la ilusión del grupo por poderlo sacar adelante.

Un proyecto escogido por un comité de evaluación con expertos del mundo universitario y de compañías del sector clínico y tecnológico

El encargado de escoger el proyecto ganador de entre las cinco propuestas presentadas ha sido un comité de evaluación, formado por los miembros siguientes: Núria Brunet Garcia (Technology Transfer Manager a la UPF), Marta Guardiola Garcia  (CTO, cofundadora y presidenta de Miwendo), Javier Jiménez (CEO y fundador de NewBorn Solutions), Núria Martí  (Directora de Innovación y Desarrollo de Negocio en Biocat), Xavier Puñet Ortiz (PhD, MPM e Innovation Business Developer a i4KIDS) y Antoni Riu (director gerente y cofundador de Galgo Medical).

Montserrat Vendrell, presidenta del Consejo Social de la UPF, describe así por qué apoyan el proyecto ganador de esta asignatura: “fomenta el aprendizaje por retos transversal y potencia la innovación y el espíritu emprendedor. Todos estos valores son los que quiere impulsar el Consejo Social, porque creemos que son los que necesita la sociedad”

Por segunda vez, el proyecto ganador de este concurso recibirá una ayuda de 5.000 euros del Consejo Social de la UPF para poderse desarrollar e implementar en entornos clínicos reales, más allá de la esfera académica.

Montserrat Vendrell, presidenta del Consejo Social de la UPF, describe así por qué apoyan el proyecto ganador de esta asignatura: “fomenta el aprendizaje por retos transversal -engloba diferentes disciplinas- y potencia la innovación y el espíritu emprendedor. Todos estos valores son los que quiere impulsar el Consejo Social, porque creemos que son los que necesita la sociedad”

Además del apoyo del Consejo Social de la UPF, el premio incluye el acompañamiento y el asesoramiento de la Unidad de Innovación - UPF Business Shuttle, que promueve la transferencia del conocimiento y el emprendimiento en el mundo científico y empresarial, a partir de proyectos generados en la Universidad.

Una asignatura para aprender a diseñar dispositivos médicos

El desarrollo de los proyectos de diseño de dispositivos médicos forma parte de la asignatura Introduction to Medical Devices and their Design (IMDD) del cuarto curso del grado en Ingeniería Biomédica de la UPF, que se imparte en los campus del Poblenou y del Mar.

El principal objetivo de la asignatura es dotar el alumnado de conocimientos sobre los mecanismos tecnológicos necesarios para desarrollar dispositivos médicos y de conceptos básicos sobre cómo comercializarlos, a través de sus posibles aplicaciones médicas. Principalmente, se trabaja en el diseño de dispositivos médicos para el tratamiento de enfermedades caridiovasculares y neurológicas.

Antoni Ivorra, coordinador de la asignatura: “Durante un par de meses, los estudiantes identifican y validan una necesidad clínica, idean un dispositivo médico como respuesta a esta necesidad clínica, analizan aspectos normativos, de propiedad intelectual, comerciales y empresariales, realizan pruebas de concepto y preparan una propuesta de desarrollo futuro para optar a un premio competitivo”

Más allá de los contenidos teóricos, la parte más importante de esta asignatura, consiste en la concepción y desarrollo de una propuesta de dispositivo médico. “Durante un par de meses, los estudiantes identifican y validan una necesidad clínica, idean un dispositivo médico como respuesta a esta necesidad clínica, analizan aspectos normativos, de propiedad intelectual, comerciales y empresariales, realizan pruebas de concepto y preparan una propuesta de desarrollo futuro para optar a un premio competitivo”, explica Antoni Ivorra, coordinador de la asignatura y profesor del Departamento de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (DTIC).

El alumnado se organiza en grupos de cuatro a ocho personas, que trabajan conjuntamente en el desarrollo de una propuesta de diseño. Pueden escoger libremente el tema del proyecto que quieren desarrollar, pero en todos los casos tienen que seguir unas pautas mínimas de trabajo, que incluyen el análisis de aspectos como las características fisiológicas y patológicas básicas de la enfermedad que será tratada a través del dispositivo diseñado; los dispositivos tecnológicos que se hayan desarrollado anteriormente con fines similares; los materiales y diseño del dispositivo propuesto; las metodologías aplicadas; las ventajas y riesgos; ejemplos de situaciones en las que se podría aplicar, etc.

Una vez diseñado su proyecto, el alumnado tiene que hacer una presentación, que se plantea con el objetivo de convencer a posibles inversores o compañías y clínicas del sector médico de los beneficios de su posible implementación. Para esta presentación, el alumnado puede exponer una demo o prototipo. En algunas ocasiones, los prototipos integran partes fabricadas con impresoras 3D, que se encuentran en el área Tallers del campus del Poblenou.

Las presentaciones de los proyectos desarrollados durante el primer trimestre de este curso tuvieron lugar el pasado viernes 2 de diciembre. Además del proyecto ganador, se presentaron cuatro propuestas más que planteaban soluciones tecnológicas vinculadas al tratamiento de enfermedades gástricas, del oído, del sistema nervioso o de la salud mental.