Atrás Las redes sociales precipitaron la estampida bancaria de Silicon Valley Bank

Las redes sociales precipitaron la estampida bancaria de Silicon Valley Bank

Un estudio realizado por investigadores de EEUU, Francia y España, entre ellos Javier Gil-Bazo, de la UPF, demuestra que la comunicación a través de Twitter actuó como motor del pánico financiero que condujo a la quiebra de la entidad bancaria. Los autores analizan la evolución de la serie temporal de tuits, en la que las conversaciones de los inversores se extienden a los depositantes y al público general, así como la relación entre las conversaciones en Twitter y las pérdidas de valor de las acciones de los bancos.

11.05.2023

Imatge inicial

El 10 de marzo de 2023 se produjo la quiebra de Silicon Valley Bank (SVB), una entidad financiera con sede en Santa Clara, California (EE.UU.). El día antes, 9 de marzo, cerca de 42.000 millones de dólares (casi una cuarta parte de todos los depósitos de la entidad) fueron retirados en pocas horas a través de la banca digital, y otros 100.000 millones estuvieron a punto de huir justo antes del colapso.

Un estudio con la participación de investigadores de EE.UU., Francia y España, entre ellos Javier Gil-Bazo, profesor del Departamento de Economía y Empresa de la UPF, también vinculado a la UPF-BSM y a la BSE, ha demostrado que aparte de otros factores de riesgo, las redes sociales amplifican el pánico financiero, y que el riesgo para los bancos aumenta notablemente cuando las entidades bancarias se encuentran en el centro de una conversación de Twitter.

El estudio es pionero a la hora de aportar pruebas directas de que la rápida comunicación a través de las redes sociales constituye un riesgo de pánico bancario

El estudio, realizado por J. Anthony Cookson (Universidad de Colorado en Boulder), Corbin Fox (Universidad James Madison), Javier Gil-Bazo (UPF, BSE y UPF-BSM), Juan F. Imbet (Universidad Paris-Dauphine) y Christoph Schiller (Universidad Estatal de Arizona) es pionero a la hora de aportar pruebas directas de que la rápida comunicación a través de las redes sociales constituye un riesgo de pánico bancario, y supone una contribución fundamental a la literatura en este ámbito.

Los autores recopilaron todos los tuits (cerca de 5,4 millones) desde el 1 de enero de 2020 hasta el 13 de marzo de 2023 que mencionaban acciones de las entidades bancarias de EE.UU. que cotizan en bolsa (tuits que contenían al menos un cashtag: $, seguido del ticker de la entidad). Analizaron el contenido de los tuits, la dinámica y la transmisión de las ideas de la estampida bancaria desde las redes sociales de los inversores hasta las redes conectadas de los depositantes, así como su impacto sobre las pérdidas de valor de las acciones de los bancos. El estudio se centró sobre todo en los tuits del período previo al pánico financiero (desde inicios de enero de 2023) y del período propiamente de la estampida bancaria (del 8 al 13 de marzo de 2023).

“Una apertura y una rapidez de transmisión de una comunicación sin precedentes”

Los investigadores detectaron que las conversaciones previas de los inversores se trasladaron a los depositantes, que utilizaron Twitter para hablar de los problemas a los que se enfrentaba SVB y de su intención de retirar sus depósitos, mayoritariamente no asegurados, para depositarlos en otros bancos. Así, la quiebra del banco fue precedida de un gran pico en Twitter, con "una apertura y una rapidez de transmisión de una comunicación sin precedentes", afirman los autores.

Los investigadores confirmaron que los bancos más vulnerables al pánico financiero, aquellos con mayores pérdidas por la subida de tipos de interés y con mayor porcentaje de depósitos no asegurados, sufrieron mayores pérdidas en bolsa durante el período de pánico bancario.

Los bancos con una gran exposición en las redes sociales obtuvieron resultados mucho peores durante la estampida bancaria de SVB, particularmente si tenían grandes pérdidas en sus balances a precio de mercado y un alto porcentaje de depósitos no asegurados

Sin embargo, la novedad del estudio está en que los autores encuentran que los bancos con una gran exposición en las redes sociales obtuvieron resultados mucho peores durante la estampida bancaria de SVB, particularmente si tenían grandes pérdidas en sus balances a precio de mercado y un alto porcentaje de depósitos no asegurados. "La comunicación abierta de los depositantes a través de las redes sociales hizo aumentar el riesgo de pánico financiero para bancos que estaban expuestos previamente a este tipo de debates en las redes", aseguran.

Papel relevante de los depositantes de la comunidad de start-ups

Así mismo, los depositantes de SBV estaban muy concentrados en la comunidad de start-ups y empresas de nueva creación, que poseían una gran cantidad de depósitos no asegurados. Debido a la naturaleza altamente interconectada de esta comunidad, fomentada por las empresas de capital riesgo, estos depositantes no sólo concentraban sus depósitos en SVB, sino que también mostraban un alto grado de comunicación en Twitter y en otros foros para compartir información.

Según los autores, los tuits escritos por miembros de esta comunidad tuvieron efectos más fuertes, sobre todo cuando contenían palabras clave relacionadas con fugas de depósitos y contagio bancario. Las conversaciones en Twitter no solo perjudicaron a SVB, sino también a otras entidades financieras. “Incluso eliminando SVB de la muestra los resultados indican que existe una fuerte asociación entre conversaciones en Twitter y pérdidas bancarias”, apuntan.

Los tuits que contenían términos más negativos, provocaron caídas inmediatas en los precios de las acciones de los bancos, exacerbando de esta manera el riesgo de fuga de depósitos

Analizando el tono de los tuits, los investigadores encontraron que aquellos que contenían términos más negativos, provocaron caídas inmediatas en los precios de las acciones de los bancos, exacerbando de esta manera el riesgo de fuga de depósitos. El efecto es mucho mayor para aquellos tuits procedentes de cuentas vinculadas a miembros de la comunidad de empresas start-up tecnológicas. “Estos resultados son consistentes con la idea de que los depositantes usaron Twiitter para comunicarse en tiempo real durante el pánico bancario”.

En conclusión, los investigadores señalan que su estudio es una muestra de que en la sociedad actual, las redes sociales proporcionan un medio para que los individuos se coordinen, y que la preeminencia de este tipo de comunicación hace presagiar que este fenómeno irá en aumento: “La amplificación del riesgo de bancarrota bancaria a través de las conversaciones en Twitter es una oportunidad única para observar la comunicación y la coordinación que dan forma a un resultado económico de importancia crítica: las dificultades de los bancos”, aseguran.

Trabajo de referencia: Cookson, J. Anthony; Fox, Corbin; Gil-Bazo, Javier; Imbet, Juan Felipe; Schiller, Christoph, “Social Media as a Bank Run Catalyst” (abril 2023), SSRN

http://dx.doi.org/10.2139/ssrn.4422754

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