Ante la demanda de ejecución de la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña que obliga a todos los centros educativos catalanes a realizar como mínimo el 25% de las clases en castellano, las universidades públicas catalanas manifiestan lo siguiente:

El modelo pedagógico de la escuela catalana ha sido y es un modelo de éxito que garantiza las competencias lingüísticas de sus alumnos.

Los resultados de la inmersión lingüística han evidenciado su beneficio, tanto para el alumnado como para el seno de la sociedad, contribuyendo así a la cohesión social, la igualdad de oportunidades y la normalización del uso de la lengua catalana.

Por tanto, pedimos que la política lingüística en la escuela no se base en porcentajes arbitrarios desconectados de la realidad territorial y se deje de instrumentalizar políticamente algo tan importante como es la enseñanza.

Los profesionales del mundo educativo, atendiendo al contexto social, deben ser las personas que determinen qué modelo lingüístico es el más adecuado para garantizar la competencia lingüística del alumnado.

Es necesario que se garantice un modelo lingüístico de escuela catalana estable que favorezca la inclusión, la cohesión y la progresión social del país.

Finalmente, los rectores y la rectora, tal y como recoge la propuesta de Pacto Nacional por la Lengua, pide un debate constructivo para que las bases lingüísticas del futuro de Cataluña y de toda la comunidad lingüística sean compartidas lo más ampliamente posible con la participación y el compromiso de las fuerzas políticas pero también de las organizaciones, de las entidades y de toda la población.

En Barcelona, Girona, Tarragona y Lleida, el 12 de mayo de 2022