La Liga de Debate en Centros Penitenciarios cumple cinco años y se reinventa. Este año, en clave femenina, porque los debates serán en Brians 1, una prisión de mujeres. En todas las ediciones anteriores solo se había celebrado en prisiones de homes. Las organizadoras consideran que el proyecto de este año se enmarca en "los parámetros de la transversalidad de género como principio rector de los poderes públicos para hacer avanzar la igualdad efectiva entre hombres y mujeres".

La iniciativa se acompaña de todo un seguido de actividades de formación y sensibilización. El pasado 4 de octubre se hizo una sesión informativa dirigida a las internas de Brians 1 a cargo de miembros del Servicio de Atención a la Comunidad Universitaria (SACU) y una de las estudiantes voluntarias. Los días 8 y 10 del mismo mes se hizo una formación en la universidad en oratoria sobre la situación de las mujeres en las cárceles a las estudiantes y alumni voluntarias que participan de la iniciativa, a cargo de Tània Verge, directora de la unitad de Igualdad, Ares Batlle, miembro de la comunidad UPF y el Col·lectiu Clivella, que es una organización que habla sobre las desigualdades que padecen las personas que han sido privadas de libertad. 

Más tarde, se hicieron formaciones en oratoria a cargo de las voluntarias a las internas del centro penitenciario, para que estas pudieran tener una base para el debate.

Una vez formadas, el 18 y 19 de noviembre habrá el primer debate y el 21 se realizará las semifinales y la final. Para extraer conclusiones, el 5 de diciembre se hará una evaluación, que será conjunta entre el equipo organizador, las docentes y las internas. 

En las últimas ediciones se habían debatido temáticas como los límites del humor o si el dinero lleva a la felicidad. Pero este año los debates se centrarán en la pregunta “¿La cultura nos hace más libres?”. Desde la organización de los eventos consideran que, tanto en ediciones anteriores como en ésta, el objetivo de los debates es el de favorecer el desarrollo de competencias comunicativas, un elemento importante para la reinserción de las presas. También se quiere aumentar la confianza de las participantes y incrementar sus ganas de aprender.

¿Quién participa del proyecto?

El evento incluye mucha gente y muy diversa: hay las impulsoras del proyecto, del SACU y de la unidad de Igualdad; el equipo coordinador, formado por mujeres de los dos servicios de la UPF y personal del centro penitenciario; las formadoras en perspectiva de género; las seis estudiantes y alumni voluntarias y las internas de Brians 1, que en esta ocasión son 12.

Las voluntarias que participan de esta edición de la Liga de Debate son  Berta Solé, Maria Calvet, Anna Puigderrajols, Claudia Barrera, Andrea Terron y Alba Vilanova. Han sido seleccionadas teniendo en cuenta si habían participado en la Liga de debate de Brians 2 o no, sus conocimientos en oratoria, la capacidad comunicativa y de adaptación al entorno y la implicación previa de las estudiantes en actividades relacionades con la igualdad de género. 

Uno de los objetivos de la Liga de debate es la interacción y el intercambio de ideas entre voluntarias de la UPF e internas 

Las voluntarias tendrán la oportunidad de conocer una realidad muy diferente a la suya, que es la de las internas en un centro penitenciario. También podrán intercambiar opiniones y perspectivas, enriqueciendo así tanto a las voluntarias como a las internas.